domingo, 19 de julio de 2009

Guardas Cívicos de Cali


Foto tomada de Internet

Qué es un guarda cívico?

"Un guarda cívico es un representante de la Administración pública que cumple un rol regulador con relación al espacio público y la tolerancia, entablando una relación directa de pedagogía con el ciudadano. Entre sus funciones está el monitorear, identificar e impartir compromisos ciudadanos en temas ambientales, de salud, control urbanístico, de espacio público y movilidad". Tomado del diario Occidente de Cali.

De mi parte, decir que muy buena la iniciativa, siempre y cuando cumpla su objetivo. En mi comunidad de Facebook se comentaba esta semana, por parte de dos colegas, muy preocupadas, que han visto cinco o seis guardas en un mismo lugar, cuando no, uno que otro haciendo visita por el celular.

Pues bien. Creo que los guardas tienen mucha labor para hacer según las instrucciones que les han impartido. En cuestión de espacio público en Cali ¡ni hablar!.

Está bien, (si es que puede decirse que está bien la ocupación del espacio público) que ocupen los andenes de vías tan importantes como el centro de Cali, pero no hay derecho al descaro, al atrevimiento, o al abuso, de ocupantes que no solo instalan mesa con sus productos, sino que cada vez la extienden más y más y los ciudadanos solo quedamos con 50 centímetros del andén para caminar.

El caso de la señora que ocupa desde hace como 30 años, la esquina del Almacén Si, calle 12 con carrera 8a, con una venta de flores secas, que no solo tiene su ¿módulo? ¿almacén? ¿caseta? sino que le resulta insuficiente y su "sala de exhibición" la tiene en parte de la calle, en toda la esquina.

En algunas esquinas, de obligado paso para cruzar una vía, hay ventas de frutas que uno debe hacer el quite. Claro, primero los ocupantes del espacio público que nosotros los ciudadanos. Me sucedió junto a Imbanaco con una venta de chontaduros, cuya mercancía estaban descargando y, por consiguiente, el "centro de acopio" era el andén en toda su extensión, y al reclamar, la respuesta fue: "No ve que estamos apenas acomodando". ¿qué tal? A nosotros los ciudadanos qué nos importa si están descargando, acomodando o vendiendo. Nos importa es el paso libre por los andenes y la ciudad bonita y armónica.

Ah! y qué decir de los ocupantes del espacio público cuyos "negocios" tienen sombrilla. Se escapa uno de quedar ensartado. Y si uno como ciudadano reclama, la respuesta es: "es que la sombrilla no sube más".

Y las ventas de comida sin ningún control: En el Paseo Bolívar, al pie del Cam, como en muchos otros lugares, venta de chancacas y dulces sin ninguna protección del ambiente. Los compradores entonces reciben un producto al que le ha caído saliva, polvo, smog...

Bueno, pero creo que también se debe contar como un problema de espacio público el sonido a todo volumen de algunos almacenes del centro en los que la música y los anuncios son insoportables para transeúntes y, mucho más, para los sufridos empleados. No hay derecho a esta contaminación auditiva.

Deseo suerte en la labor de los guardas cívicos: "monitorear, identificar e impartir compromisos ciudadanos en temas ambientales, de salud, control urbanístico, de espacio público y movilidad", pues en la medida en que, poco a poco, se vean los resultados, seremos más felices de lo que somos.